Costa Rica quiere ser la alternativa al dominio asiático en semiconductores

Ha lanzado un proyecto que busca liderar la industria de semiconductores en Latinoamérica, con EE.UU. como aliado estratégico.

Pedro Fernaud

Periodista

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Grupo de especialistas en una fábrica de chips. Imagen de recurso.
Grupo de especialistas en una fábrica de chips. Imagen de recurso.

"Pura vida" es una expresión muy emblemática de Costa Rica que se emplea para reflejar el estilo de vida y la actitud positiva de los costarricenses. Se utiliza en una amplia variedad de contextos para expresar gratitud, optimismo, sencillez y la apreciación por las cosas buenas de la vida: la paz, el bienestar y la conexión humana. Habla también del espíritu relajado, amistoso y acogedor del país. Este aforismo nos ayuda a comprender la audacia de la que está haciendo gala el gobierno de Costa Rica en los últimos tiempos, cuando ha emprendido un proyecto lleno de ambición y buenos mimbres para convertirse en un referente tecnológico en la industria de semiconductores en América Latina, con el objetivo de emular el éxito de Silicon Valley. El caso es que hablamos de un proyecto de gran calado, que trasciende los márgenes regionales americanos, ya que la industria de los semiconductores aporta materiales esenciales para la fabricación de teléfonos móviles, automóviles y otros dispositivos tecnológicos.

¿Por qué una de las referencias mundiales de los semiconductores está en Silicon Valley y por qué este epicentro tecnológico se ha convertido en la baliza que toma como punto de referencia Costa Rica? Porque en Silicon Valley funciona el núcleo global de la industria de semiconductores, originado por pioneras empresas tecnológicas como Fairchild Semiconductor e Intel. La región destaca por su cultura de innovación, talento procedente de universidades prestigiosas y un ecosistema de capital de riesgo más que consistente. Además, esta meca del conocimiento, que se encuentra en el área de la Bahía de San Francisco, en California, EE.UU., y es sede de muchas empresas tecnológicas importantes y emergentes (startups), alberga a gigantes tecnológicos como Apple, Google, Facebook y Netflix. También es el hogar de reputadas universidades como Stanford, que han desempeñado un papel importante en el desarrollo de la industria tecnológica, que depende en gran medida de los semiconductores para articular sus productos.

El apoyo de EE.UU. a Costa Rica para que amplíe las fuentes de semiconductores

La iniciativa costarricense que estamos refiriendo cuenta nada menos con el respaldo de Estados Unidos. ¿Cómo quiere articular el gobierno costarricense su propuesta? El ejecutivo tico ha delineado estrategias que incluyen el desarrollo del talento local, la atracción de inversiones y la creación de un entorno regulatorio favorable. No en vano, esta iniciativa se ha consolidado con el respaldo directo de Estados Unidos, que ha designado a Costa Rica como su primer aliado estratégico en lo relativo a leyes relacionadas con semiconductores y ciencia, fortaleciendo así la colaboración bilateral entre ambas naciones en este sector crucial.

Además, en Costa Rica se están implementando programas educativos especializados para fortalecer las capacidades de los trabajadores ticos en el ámbito de la tecnología, la microelectrónica y los semiconductores. En este contexto de oportunidad de dimensiones históricas, la Universidad Latinoamericana de Ciencia y Tecnología (ULACIT) ha modelado,  desde su Centro de Innovación Tecnológica (CIT), la especialización en Semiconductores y Verificación. Esta formación preparará a estudiantes para puestos en empresas globales que se establecerán en Costa Rica. “Estamos comprometidos en brindar a nuestros estudiantes una educación de calidad que combine sólidos fundamentos teóricos con experiencia práctica en el diseño, fabricación y aplicación de dispositivos semiconductores. Nuestro plan de estudios ha sido cuidadosamente diseñado en colaboración con expertos de la industria, para garantizar que nuestros graduados estén equipados con las habilidades y el conocimiento necesarios para sobresalir en este campo dinámico”, señala Marianela Núñez, rectora de ULACIT.

Beneficios de que Costa Rica sea nuevo epicentro tecnológico de semiconductores

Entre las principales ventajas de que Costa Rica se integre con mayúsculas en la red mundial de abastecimiento de semiconductores se encontrarían:

Generación de empleo

La industria de semiconductores requiere una amplia variedad de mano de obra, lo que comportará la creación de una gran cantidad de nuevos puestos de trabajo en Costa Rica, mejorando así la tasa de empleo (actualmente, este país centroamericano tiene una tasa de desempleo de 7,9%, según la Encuesta Continua de Empleo (ECE) del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) del país centroamericano de enero 2024 y proporcionará así mismo oportunidades laborales de elevada cualificación.

Impulso económico

El sector de semiconductores tiene un enorme potencial de crecimiento, lo cual se traducirá en un significativo impulso a la economía costarricense. Este dinamismo no sólo fortalecerá la economía nacional, sino que también podría posicionar a Costa Rica como un actor clave en el mercado global de alta tecnología.

Transferencia de conocimiento y tecnología

La llegada de empresas de semiconductores a Costa Rica promoverá la transferencia de tecnología avanzada y conocimientos especializados al país. Esto no solo beneficiaría al sector específico, sino que también impulsará la innovación y el desarrollo en otras áreas industriales y tecnológicas.

Avance científico y tecnológico

El establecimiento y desarrollo de la industria de semiconductores en este país centroamericano fomentará la investigación y el avance científico y tecnológico. Este entorno podría atraer a científicos, ingenieros e investigadores, creando así un ecosistema de innovación y desarrollo continuo.

Diversificación económica

Además, la presencia de la industria de semiconductores contribuirá a diversificar la economía costarricense, reduciendo la dependencia de sectores tradicionales y aumentando la resiliencia económica ante fluctuaciones del mercado global.

Mejoramiento de la infraestructura

La necesidad de infraestructura avanzada para soportar la industria de semiconductores impulsará las mejoras en las instalaciones tecnológicas y de comunicaciones del país, beneficiando a otros sectores y a la población en general. Estas mejoras probablemente se traducirán en la modernización de redes de telecomunicaciones de 5G para garantizar una conectividad rápida y estable, y la ampliación de las redes eléctricas para asegurar un suministro constante y fiable de energía. Estas mejoras no solo beneficiarán a la industria de semiconductores, sino también a otros sectores como el comercio, la educación y la salud, al proporcionar una infraestructura tecnológica más robusta y avanzada para la población en general.

El compromiso de Costa Rica con esta iniciativa se refleja en varias acciones concretas, como la declaración de la industria de semiconductores y actividades relacionadas como de interés público y nacional.

 

Costa Rica como alternativa al abrumador dominio asiático

La hoja de ruta de este proyecto consiste en emular el formidable desarrollo que ya se ha logrado concretar en otras industrias del país costarricense como la de dispositivos médicos, lo que sugiere un compromiso de enjundia del gobierno costarricense hacia el desarrollo tecnológico. En este contexto, el ministro de Comercio Exterior, Manuel Tovar, ha remarcado a CNN que la intención es convertir a Costa Rica en un Silicon Valley en América Latina, “porque cuenta con todas las condiciones para hacerlo”. En esa línea, el responsable del gobierno tico matizó que “no necesariamente tiene que existir un único Silicon Valley latinoamericano”, pero que Costa Rica ha sido validada para cumplir esta función y congrega todas las condiciones “para convertirse en ese hub (nodo) regional”.

En ese sentido, el gobierno del país centroamericano destaca el apoyo de Estados Unidos, que en julio de 2023 designó a Costa Rica como el primer país aliado estratégico a través de la ley de semiconductores y ciencia. Consciente de ese marco, Tovar señala que el país cuenta con incentivos que lo sitúan “como un actor relevante y parte de la solución” para aminorar la excesiva dependencia de Asia en la manufactura de semiconductores. Tanto es así que los principales países asiáticos que fabrican semiconductores, como Taiwán, China, Japón y Corea del Sur son cruciales para el mundo debido a su avanzada tecnología, alta capacidad de producción y dominio en el mercado global de chips. Hasta el punto de que estos 4 países congregan más del 80% de la producción mundial de semiconductores.

El gobierno costarricense presentó el pasado 21 de marzo esta estrategia para cimentar una industria de calado en el ámbito de los semiconductores. El acto contó con la presencia de la secretaria de Comercio de Estados Unidos, Gina Raimondo, lo que el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, calificó como un voto de confianza hacia Costa Rica. El mandatario agradeció la designación de aliado para Costa Rica, que describió como “verdaderamente un orgullo, un honor”. Por su parte, Raimondo expresó que Estados Unidos está encantado de fortalecer la alianza de semiconductores. “Es beneficioso para nosotros y para ustedes, y no puedo esperar a trabajar con ustedes para ayudarles a lograr sus metas”, señaló.

Recapitulando, el compromiso de Costa Rica con esta iniciativa se refleja en varias acciones concretas, como la declaración de la industria de semiconductores y actividades relacionadas como de interés público y nacional. Este respaldo gubernamental, en definitiva, aspira a fomentar inversiones y establecer un marco propicio para el crecimiento de este sector. El proyecto se articula a través de la capacitación especializada y el establecimiento de redes de colaboración, de esta manera Costa Rica aprovecha la experiencia acumulada en su territorio desde la llegada de empresas del sector, como Intel en 1997, para construir una industria adicional de semiconductores que aporte más equilibrio y diversidad de opciones para nutrirse de semiconductores a la Comunidad Internacional. El fortalecimiento de la producción de microchips en Costa Rica representa, así mismo, una alternativa segura, confiable y cercana para países como EE.UU., quienes ven al país latinoamericano como un estupendo proveedor, que potencialmente diversificará las cadenas de suministro del sector y mejorará su resiliencia.

En resumen, hablamos de unas medidas que, respaldadas por el propio gobierno tico y con el apoyo estratégico de Estados Unidos, apuntan a posicionar a Costa Rica como un líder regional en la industria de semiconductores y a diversificar su economía hacia sectores de alta tecnología, con los beneficios que eso comportará a escala internacional, aportando un suministro de semiconductores más equilibrado y diversificado al conjunto de actores de la Comunidad Internacional.

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