Con el inicio del curso escolar, de nuevo se pone sobre la mesa uno de los temas que más preocupa a las familias de toda España. Se trata del bullying o acoso escolar, un terrible y silencioso problema que afecta diariamente a millones de niños y jóvenes en los colegios, como ya hemos advertido desde Escudo Digital en distintas ocasiones.
De acuerdo con el Estudio Oficial realizado por la ONG Internacional Bullying Sin Fronteras para Europa, América, Asia, Oceanía y África, realizado entre marzo 2022 y abril 2023, España ocupa la tercera posición en casos de bullying en el mundo. Durante el año 2020-2021 los casos reportados fueron 11.229, y en el período 2022-2023 este número se incrementó a 69.554 casos.
Casi el 10% de los alumnos de primaria (9,53%) de los colegios españoles reconoce haber sufrido acoso escolar y un porcentaje muy similar, el 9,2%, haber sido víctima de ciberbullying, aunque los padres que piensan que sus hijos han sido acosados descienden al 7,7%. Así se desprende del primer Estudio Estatal de la Convivencia Escolar en Educación Primaria, el mayor estudio realizado hasta la fecha en este ámbito y que fue presentado el pasado mes de mayo por el Ministerio de Educación y Formación Profesional.
Las diferentes formas de actuar de los alumnos ante el acoso escolar
Este informe, elaborado por el grupo de investigación Imeca, de la Universidad de Alcalá de Henares (Madrid), a petición del ministerio –contando con datos de más de 37.000 alumnos, docentes, familias, equipos directivos y de orientación– también muestra cuáles son las principales formas de afrontar el acoso por parte del alumnado que ha presenciado un caso. Casi un tercio de los alumnos, el 30,9%, indica habérselo comunicado a un profesor, el 20,17% a un familiar y el 14,8% a un compañero. Por otro lado, el 17,65% de los alumnos asegura haberse sentido mal al presenciar la situación, el 9,83% haberse enfrentado al agresor y el 7,18% haberse quedado sin saber qué podía hacer.
El acoso escolar, también la causa de ocho suicidios en solo tres meses
Otros datos más alarmantes son los que recogen las tasas de suicidios de niños y adolescentes en los últimos tres años, revelados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Según señalan, a lo largo del año 2021 se suicidaron 22 menores de 14 años, durante el año 2022 esta cifra se duplicó al igual que el rango de edades, el cual se extendió de 6 a 18 años, sin considerar el incremento de casos de niños y adolescentes que acuden a las consultas por autolesiones y con pensamientos suicidas recurrentes. Además, solamente en el período de tiempo comprendido entre febrero y mayo de 2023 se contabilizaron hasta al menos ocho casos de suicidios por causa del acoso escolar.
Ante este panorama desolador, son muchos los estamentos y las organizaciones que han dado una voz de alarma y piden mayor implicación a las direcciones de los colegios y a las propias inspecciones de educación respectivas que, según denuncian los propios familiares de víctimas de estas prácticas de bullying, "no se implican lo necesario para parar de raíz a los acosadores, que son cada vez más jóvenes, más reiterativos año tras año, y ven como sus prácticas quedan impunes".
"Al final esta tragedia marca para toda la vida a nuestros hijos, aunque recurras a ayudas externas"
"Abrir un protocolo de 'bullying' es casi una misión imposible porque tanto a los colegios como a las instancias educativas que tienen que vigilar esta lacra no les gusta que aumenten sus estadísticas y pongan en duda sus sistemas pedagógicos, de prevención e incluso punitivos, como es, por ejemplo, expulsar de los centros a los maltratadores para dar una salida a los adolescentes acosados. Al final esta tragedia, este silencioso flagelo, marca para toda la vida a nuestros hijos, aunque recurras a ayudas externas", narran para Escudo Digital varias familias que no acaba de ver la luz al final del túnel.
Este es el caso del colegio Héroes del 2 de Mayo de Colmenar Viejo (Madrid), donde, tras la pausa estival, siguen produciéndose casos de acoso y falta de diligencia para atajarlos por parte del equipo directivo encabezado por Rodrigo Ibañez García, como ya en su momento se explicó en estas mismas páginas:
La Policía Nacional ya ha reanudado su plan para luchar contra el bullying
Para este nuevo curso, la Policía Nacional ha reactivado las labores preventivas en los centros educativos, actividades que se encuentran enmarcadas en el 'Plan Director', coordinado desde la Unidad Central de Participación Ciudadana y en el cual estarían participando más de 500 expertos policiales. Solamente el pasado año realizaron más de 25.000 formaciones en colegios de toda España.
Según la propia policía, la soledad, la tristeza y el miedo son los componentes principales del bullying y el ciberbullying, y algunos de estos componentes se escapan muchas veces de las manos de los padres, principalmente por razones laborales. No obstante, existen otras formas de comunicación que pueden resultar efectivas, además de la comunicación con los profesores, que también es vital porque al final de trata de un trabajo en un equipo en el que todos juegan un papel importante.
En esta línea, el primer Estudio Estatal de la Convivencia Escolar en Educación Primaria realiza una serie de propuestas educativas para mejorar la convivencia, como elaborar las normas de convivencia de aula con la participación del alumnado, intensificar la formación inicial y continúa del profesorado o agilizar la carga burocrática en la gestión de la convivencia escolar en los centros educativos.
En sus conclusiones, recuerda además que mantener una buena convivencia escolar incide directamente en la calidad educativa, mejorando el rendimiento académico, el bienestar y la autoestima de los estudiantes y previniendo diferentes expresiones de violencia como el acoso escolar.