El pasado 6 de julio se cumplieron dos años del atropello mortal que acabó con la vida de Leire, una niña de tan solo cinco años. El trágico suceso tuvo lugar alrededor de las 20:20h en Roquetas de Mar (Almería), donde un coche se llevó por delante a la pequeña mientras cruzaba un paso de peatones de la mano de su madre, Rocío, entonces embarazada de cuatro meses.
El conductor del vehículo era F.M.S., un legionario originario de Jaén que en aquel momento tenía 27 años y conducía con una tasa de alcohol elevadísima, tanto que casi cuadriplicaba la permitida. Así lo confirmó el atestado de la Policía Local de Roquetas de Mar, recogido por El Periódico y que contiene los resultados de la prueba de alcoholemia a la que fue sometido, la cual arrojó que tenía una cantidad de 0.98 gramos de alcohol por litro de aire aspirado. Asimismo, el atestado señala que el militar salió del coche con los "ojos rojos", la "boca pastosa", un evidente "tambaleo" y un fuerte "olor a alcohol".
"No se acercó ni siquiera a ver qué le había pasado a la niña ni a intentar socorrerla. Salió, se apoyó en el capó del coche, se echó las manos a la cabeza y ya está. No hizo nada más", ha afirmado la tía de Leire, Deborah, en declaraciones para el citado medio, que señala que los servicios de emergencia no pudieron hacer nada por salvar la vida de Leire, quien desgraciadamente falleció tras media hora de reanimación.
Además, apunta que en el momento del accidente el militar llevaba un vaso de ginebra y tónica junto al volante, y circulaba a una velocidad de unos 83km/hora cuando lo máximo permitido en esa vía era de 50km/hora.
Siguiendo la información de El Periódico, F.M.S. admitió ante el juez que "se tomó cuatro o cinco cervezas comiendo" y que después se fue a un local, donde tomó "dos o tres copas más" y se llevó el vaso de gintonic que los agentes encontraron en su coche. No obstante, aseguró que condujo "porque se veía en plenas facultades" y que no vio a la niña porque en la zona "había vegetación" que le reducía la visibilidad, un dato que ha sido desmentido por el Ayuntamiento de Roquetas de Mar.
Habría ofrecido dinero a la familia para evitar el juicio, que se celebra el próximo mes de octubre
Según ha asegurado la tía de Leire, F.M.S. ha tratado de llegar a un acuerdo económico con la familia para intentar evitar el juicio, si bien "nunca llamó para pedir perdón ni se interesó".
"A través de su abogado", señala Deborah, "nos hizo llegar que ofrecía una indemnización, pagarnos un dinero, aparte del que recibiéramos del seguro. Daba 70.000 euros a cambio de llegar a un acuerdo por escrito para que retiraran los cargos contra él".
La familia de Leire se opuso completamente a esta propuesta y, tras dos años de lucha judicial, el próximo 19 de octubre tendrá lugar el juicio por el caso en el Juzgado Penal número 3 de Almería. El legionario, en libertad con cargos, se enfrenta a cinco años de cárcel (es lo que pide la familia de la niña), mientras que el fiscal, por su parte, solicita una pena de cuatro.