La Policía francesa busca a los autores de un robo en el domicilio de un empleado del gigante aeroespacial y de defensa galo Thales, quien trabaja como responsable de la organización de los Juegos Olímpicos de París 2024, que se celebrarán del próximo 26 de julio al 11 de agosto.
La noticia ha sido adelantada por Europe 1, que indica que el allanamiento de la vivienda, ubicada en la localidad de Sceaux, tuvo lugar alrededor de las dos de la madrugada de la noche del domingo 14 al lunes 15 de abril y que el propio empleado fue quien alertó a la policía, después de que se despertara sobresaltado por el sonido de una ventana rota. Esa ventana habría sido la vía de entrada de los ladrones, que actuaron rápido y se llevaron tres ordenadores portátiles y un teléfono móvil de la casa del trabajador de Thales.
Los datos sensibles que podrían contener los dispositivos han hecho saltar las alarmas. Según fuentes policiales, el empleado declaró que uno de los portátiles contenía información sensible, de vigilancia territorial, relacionada con su labor como encargado de la organización de los Juegos Olímpicos, informa el citado medio francés. Sin embargo, apunta que desde Thales han matizado que la víctima no estaba trabajando en ningún programa de seguridad vinculado a la cita olímpica. Además, Le Parisien señala que el servicio de seguridad de la empresa bloqueó inmediatamente tanto el ordenador como el teléfono, y que los primeros controles policiales confirmaron que los dispositivos no almacenaban ningún dato secreto.
"El grupo tecnológico también tiene previsto presentar una denuncia tras este robo. Un robo cuyos autores se encuentran actualmente prófugos y son buscados activamente", subraya Europe 1, que también recuerda que este no es el primer caso de robo de un ordenador portátil que contiene información sobre la organización de los Juegos Olímpicos de París. Y es que a principios de marzo se produjo otro robo de un ordenador que contenía información sobre el gran evento deportivo, cuyos datos no se consideraron confidenciales, y el pasado mes de febrero también se sustrajeron de un tren otro ordenador y dos USB que almacenaban el mismo tipo de información, pertenecientes a un empleado del Ayuntamiento de París.
A todos estos robos Le Parisien suma otro más, el que ha sufrido un empleado de otra "empresa sensible", la Comisión de Energía Atómica (CEA), por parte de unos ladrones que se llevaron de su domicilio dos ordenadores, además de artículos de cuero. "Se están realizando verificaciones, pero a priori estos ordenadores tampoco contenían datos sensibles".