Solo el 5,6% de los comercios españoles considera que la implantación del euro digital tendrá un efecto positivo para sus negocios, según un estudio realizado por Prosegur Cash que ha tomado en cuenta la opinión de más de 500 establecimientos comerciales de nuestro país.
Este nuevo método de pago, impulsado por el Banco Central Europeo, ha entrado en una nueva fase de preparación este pasado mes de octubre y está llamado a convivir con el efectivo, las tarjetas de crédito o las criptomonedas.
A través de una encuesta se han analizado establecimientos de diferentes sectores, como farmacias, gasolineras, loterías, estancos, restaurantes y pequeños (hasta 3 empleados) y medianos (entre 3 y 7 empleados) establecimientos de moda y alimentación. Los más optimistas con la llegada del euro digital son las estaciones de servicios y gasolineras, con un 10,6%, seguidos de cerca por las farmacias, 9,8%.
Por otro lado, los pequeños y medianos establecimientos de alimentación (20%) y las Loterías del Estado (14,5%) expresan una mayor resistencia, con un porcentaje significativo que anticipa un impacto negativo.
Un aspecto relevante que se destaca en el estudio es el gran desconocimiento sobre el euro digital. En este sentido, 4 de cada 10 responsables de establecimientos, concretamente un 39,5%, manifiestan su desconocimiento a la hora de poder valorar cómo les afectará la llegada de este nuevo método de pago.
Además, en una línea parecida, cerca de la mitad de los establecimientos españoles, un 45,3%, creen que el euro digital no tendrá un impacto significativo (sea positivo o negativo) en sus negocios. Sobre este último punto, Andalucía, con un 80%, es la comunidad autónoma en la que los comercios consideran que el euro digital tendrá menos repercusión en su actividad; seguida por Castilla y León, con el 77,4%, y Galicia, con un 73,3%. En el otro extremo, solo el 20% de los establecimientos de Madrid cree que este nuevo método de pago no tendrá un impacto significativo.