El 11% de las personas con ingresos bajos tiene un descanso muy deficiente

El estrés y las preocupaciones diarias son los principales factores de un mal descanso, según una encuesta realizada por IKEA.

Guardar

Una mujer descansa en su cama. Imagen de IKEA.
Una mujer descansa en su cama. Imagen de IKEA.

El nivel de ingresos influye de forma determinante en el descanso de las personas, hasta el punto de que quienes tienen rentas bajas declaran dormir menos, con peor calidad de sueño y levantarse más cansados al día siguiente que quienes cobran salarios superiores.

Así lo pone de manifiesto una encuesta realizada por IKEA a 2.540 ciudadanos mayores de 18 años entre el 26 de julio y el 7 de agosto junto a la Alianza para el Sueño, dada a conocer ante el inicio del nuevo curso con motivo del lanzamiento de su nueva campaña 'Permítete Descansar'.

El 11% de las personas con ingresos bajos (por debajo de 1.200 euros mensuales) tiene un descanso muy deficiente, que se traduce en que duermen menos de 6 horas, tienen problemas para iniciar y mantener el sueño durante la noche, y se levantan cansados al día siguiente.

Por su parte, las personas con ingresos medios (entre 1.201 y 3.000 euros) que declaran un descanso muy deficiente representan el 8%, lo que representa tres puntos menos que en el caso de rentas bajas. Mientras, las personas con altos ingresos (entre 3.001 y 6.000) llegan al 7% con esta situación.

Entre los motivos que impiden un descanso de calidad el principal factor es el estrés y las preocupaciones del día a día para el 58%. Al margen del estrés, hay otros múltiples motivos que también influyen directamente en la calidad del sueño, como, por ejemplo, el ruido, la luz o el uso de pantallas antes de dormir.

Dentro del marco de colaboración entre IKEA y la Alianza para el Sueño, a finales de septiembre se presentará un estudio, desarrollado conjuntamente, centrado en la relación entre el sueño de calidad y los elementos que lo configuran y cómo las diferencias socioeconómicas pueden afectar a la salud del sueño.

En el estudio se mostrarán resultados que demuestran que las alteraciones graves en la calidad del sueño, como es el trastorno de insomnio, afectan a la satisfacción con la vida percibida del paciente, así como al deterioro de la calidad de la salud mental y física, afectando también a la productividad, la accidentabilidad laboral y el absentismo.

Dentro de este foco estratégico de IKEA en el descanso y con los datos arrojados por la encuesta, este domingo arranca la nueva campaña de la marca sueca 'Permítete Descansar', que habla de la relevancia de la calidad del sueño y el descanso centrándolo en los seis esenciales del descanso: comodidad, luz, temperatura, sonido, calidad de aire y orden.