¿Y si existiese un botón para acabar con el estrés en el trabajo? Lógicamente no se ha inventado aún, y probablemente no se haga nunca, pero sería una gran idea. España es el quinto país con más estrés de la Unión Europea, y las cifras no son bajas. El estrés afecta al menos al 70% de la población española.
Estas elevadas cifras se deben, sobre todo, a las dificultades laborales, relativas a la conciliación o a cambios en el entorno laboral. Casi cuatro de cada diez españoles confiesa estar estresado por algún motivo relacionado con su trabajo. Las tensiones familiares o con amigos son, a distancia, la segunda preocupación para los ciudadanos, según revela el IV Estudio de Salud y Estilo de Vida de la aseguradora de salud Aegon, elaborado con la colaboración del Consejo General de la Psicología de España (COP).
Y en el caso de los expertos en ciberseguridad, este problema aún va más lejos, como hace unos meses mostraba el informe Devo SOC Performance ReportTM elaborado por la empresa de seguridad y analítica de datos Devo, que señalaba que el 60% de los profesionales en ciberseguridad estaban considerando la posibilidad de cambiar de carrera o dejar su trabajo debido al estrés, y el 75% afirmaba estar agotado ante el aumento de la carga de trabajo de los últimos años.
Entre los efectos que el estrés genera entre los españoles destacan, principalmente, los síntomas psicológicos como preocupación, dificultad para concentrarse o problemas de sueño o ansiedad. La segunda manifestación más frecuentemente mencionada (27%) son los problemas como el dolor de cabeza, la tensión muscular o dolores de espalda y cuello.
El botón para disipar el estrés
¿Qué hacer para disipar el estrés? El mencionado Estudio de Salud y Estilo de Vida señala que solo el 40% de quienes afirman haber sufrido estrés en el último mes dicen haber tomado alguna medida al respecto. Entre las medidas más frecuentemente mencionadas se encuentran, en primer lugar, el cambio de rutina y hábitos de vida como la alimentación, el descanso y la práctica deportiva (47,9%); en segundo lugar, la práctica de actividades de ocio o quedar con amigos (40,5%) y, en tercer lugar, tomar algún medicamento o suplemento (39,4%).
Con menor frecuencia, los encuestados han informado de actividades de conocimiento personal, como leer libros de autoayuda o ejercicios de relajación (33,9%), acudir al psicólogo (20,8%) o al centro de salud (15,1%), como otras estrategias para manejar el estrés.
Lo que quizás no se le haya ocurrido a tanta gente es tirar de ingenio para enfrentarse al problema. Si el estrés va asociado al trabajo y allí es donde sufrimos mayores picos de nerviosismo, ¿por qué no buscar algo que se puede utilizar en el mismo entrono laboral?
Hay artilugios que pueden servir, y mucho, para descargar nuestra frustración en momentos de estrés y enajenación, como este botón gigante de “enter” al que podemos pegar puñetazos si algo nos contraria.
Ojo, que no es una bola de gomaespuma cualquiera. Funciona perfectamente (es decir, cumple las mismas funciones que una tecla de ‘enter’) y solo cuesta 18 euros en Amazon. Obviamente, no viene recomendado por ningún médico, pero a buen seguro, puede arrancar más de una sonrisa a tus compañeros de oficina.