El primer ministro israelí, Naftali Bennett, ordenó ayer domingo al Gobierno que lidera la preparación de la normativa necesaria a nivel jurídico para habilitar el seguimiento y ubicación por medios digitales de las personas que tengan que guardar cuarentena por coronavirus.
La iniciativa retomaría así los envíos de SMS por parte de la Policía para que las personas en cuarentena puedan ser localizadas que anunció el anterior gobierno liderado por Benjamin Netanyahu pero que apenas tuvo uso.
Las personas que reciban el SMS deberán responder enviando una fotografía propia tras lo cual la Policía utilizará el sistema GPS para triangular la posición exacta desde la que se envió la imagen. Quien no responda al mensajes de texto recibirá la visita de la Policía.
Más de 1.000 contagios diarios desde hace meses
Los contagios por coronavirus se han incrementado en los últimos días en Israel con más de 1.000 contagios diarios el viernes por primera vez desde hace meses. También han aumentado los casos graves.
Bennett ha pedido además que se puedan imputar cargos penales a quienes hayan dado positivo por coronavirus e incumplan la cuarentena, además de reducir el plazo entre la infracción y el pago de multas.
Así se aplicarán multas de 5.000 shéqueles (unos 1.300 euros) a los salones de eventos cuyos asistentes no respeten las normas sobre uso de mascarilla. "Habrá policías en cada esquina", ha advertido el viceministro de Sanidad, Yoav Segalovitz, en declaraciones al diario Yedioth Aharonot.