La Policía de Corea del Sur ha iniciado este lunes una investigación preliminar contra la red de mensajería Telegram por supuesta negligencia y complicidad al permitir una serie de delitos sexuales relacionados con la práctica del deepfake.
La investigación se ha puesto en marcha días después de salir a la luz un grupo de Telegram con más de 220.000 usuarios que compartían material pornográfico manipulado creado por inteligencia artificial, incluso de menores de edad. Entre el lunes y el jueves de la semana pasada se presentaron 88 denuncias por estos hechos.
"Los cargos son por complicidad en este crimen", ha señalado la Agencia de Policía Metropolitana de Seúl. El jefe de la oficina de investigación, Woo Jong Soo, ha reconocido que el proceso cuenta con amplios desafíos, pues Telegram no suele facilitar datos, como información de cuentas, informa la agencia Yonhap.
La semana pasada el Gobierno de Corea del Sur pidió a Telegram y a otras empresas de redes sociales que eliminaran este tipo de contenido de sus plataformas debido al aumento de este tipo de delitos, que han afectado principalmente a grupos de estudiantes y jóvenes adolescentes de todo el país.
Mientras tanto, el director ejecutivo de Telegram, Pavel Durov, fue imputado formalmente la semana pasada en Francia por su presunta responsabilidad en varios delitos perpetrados a través de la plataforma, entre ellos la difusión de pornografía infantil.