Dentro de cuatro años quizás no pasemos tanto tiempo en las redes sociales. Pero invertiremos tiempo, y bastante, en manejar las distintas apps de inteligencia artificial que atesore nuestro dispositivo. Tanto como sesenta minutos al día, y pagaremos por ello entre 30 y 40 dólares al mes, unos 36 euros de media.
Son al menos las previsiones de Sopra Steria Next, que ha hecho públicas en un estudio que analiza el impacto de la inteligencia artificial generativa en nuestras vidas. La consultora vaticina un crecimiento exponencial para esta tecnología, cuyo mercado se multiplicará por diez en solo cinco años. Entre 2023 y 2028, pasará de suponer 8.000 millones de dólares a unos 100.000 millones.
Esto supone un incremento anual de un 65%, que será monetizado, previsiblemente, a través de apps de pago. Se acabó el modelo de café para todos. El ChatGPT gratuito que hoy conocemos todos dejará de tener sentido una vez que todo el mundo lo haya probado y sea consciente del valor de su uso. De lo que implica poder contar con una herramienta productiva que marca la diferencia entre unos trabajadores y otros.
Por ello, pasaremos mucho más tiempo empleando unas aplicaciones que sirven mucho más que para redactar textos y ayudarnos a superar el síndrome del folio en blanco. Las aplicaciones de IA generativa sirven hoy ya para crear páginas web, diseñar logotipos, editar fotos, hacer presentaciones, generar videos cortos o crear voces artificiales. También nos pueden servir, por ejemplo, para conocer el coste de un ciberataque antes de que se produzca, o calcular el riesgo de una hipoteca.
Muchas de estas funciones son hoy esenciales para garantizar la productividad en un entorno competitivo. Si un trabajador emplea la mitad de tiempo que otro en realizar presentaciones, editar fotos o crear videos corporativos seguramente crezca su valor para la compañía donde desarrolla su labor. Y para lograr eso, seguramente le resulte rentable emplear una aplicación de pago.
Hoy solo un 15% de los usuarios de IA generativa pagan por su uso, pero Sopra Steria pronostica un rápido fin de esta tendencia. En solo cuatro años, asegura su informe, serán un 50% de los usuarios quienes empleen aplicaciones de pago. "Nuestro estudio muestra que 2024 marcará el comienzo de un aumento exponencial en la monetización de la IA generativa, con la venta de cada vez más servicios, tanto por parte de los principales actores tecnológicos como por parte de una multitud de startups que están empezando a surgir, dirigidas a casos de uso específicos", dice Fabrice Asvazadourian, Chief Executive Officer de la compañía.
Hoy muchas herramientas de IA generativa incluyen una versión gratuita, pero apenas sirve para realizar un par de pruebas o bien incluyen una marca de agua en las fotos o videos editados. Empresas como HeyGen, Lovo, Gamma o Fliki exigen a sus usuarios intensivos el pago de una cuota mensual para poder utilizar sus servicios.
"Lo que estos casos nos muestran es que la IA generativa representa un paradigma totalmente nuevo para la competitividad empresarial, por lo que es vital que los líderes pasen de la fase de descubrimiento y familiarización a un verdadero enfoque programático en 2024", afirma Fabrice Asvazadourian.
"El reto consiste en implantar esta tecnología de forma gradual, encontrar el equilibrio adecuado entre proactividad y control, y coordinar las dimensiones tecnológicas, reglamentarias y humanas implicadas. En un momento en que todo el mundo habla de 'humanos aumentados por IA', nuestra experiencia con nuestros clientes nos ha convencido de que la clave del éxito es garantizar que inteligencia artificial también siga siendo 'aumentada por humanos'", concluye.