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La Inteligencia Artificial que ha aprendido a rezar

El ingenio "reza" gracias a un algoritmo entrenado con miles de plegarias y toma la voz prestada de Amazon.

Gonzalo Díaz Bonet.

Especialista en Tecnología y Sostenibilidad.

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the prayer
the prayer

Rezar había sido hasta la fecha un patrimonio exclusivo de los seres humanos, desde tiempos inmemoriales. Hasta que una Inteligencia Artificial ha aprendido a hacerlo. Se trata de un ingenio de la artista Diemut Strebe, un proyecto que conjuga tecnología, arte y religión y que ha sido recientemente expuesto en el Centro Pompidou de París.

‘The Prayer’, que así se llama el proyecto, reza gracias a un algoritmo entrenado con miles de plegarias y textos religiosos. Su Inteligencia Artificial es capaz de componer nuevas variantes de todas las plegarias conocidas. Para entonar sus oraciones, toma la voz prestada del asistente de voz de Amazon.

El sitio oficial del proyecto explica que se trata de una “configuración experimental para explorar las posibilidades de una aproximación a las entidades celestiales mediante la realización de una cadena potencialmente interminable de rutinas religiosas e intentos devocionales de comunicación a través de un software de aprendizaje automático”.

Con este ingenio Strebe no pretende descubrir una nueva forma de acercarse a lo celestial, sino reflexionar acerca de la creciente omnipotencia de la inteligencia artificial. En la plataforma de la iniciativa aparecen interrogantes como los que siguen: ¿Podrá alguna vez la inteligencia artificial tener emociones? ¿Soñar? ¿Acaso tener una epifanía divina?

“La ciencia nos dio la libertad para comprender el mundo y controlarlo, y ahora estamos llegando al siguiente nivel, donde la tecnología podría escaparse de nuestras manos”, ha dicho la artista ítalo-alemana  que, con su arte reclama el consenso de prácticas para el desarrollo ético de la inteligencia artificial.

Una de sus propuestas más conocidas es un proyecto en el que trabajó junto con científicos para conseguir que vuelva a crecer la oreja de Van Gogh. Para eso empleó impresoras 3D y ADN de un pariente cercano del pintor neerlandés. Aquel trabajo “explora el potencial y las implicaciones de recrear una persona histórica, y cuestiona la mistificación del arte y del artista por parte del público y los teóricos”, se puede leer en su biografía.

Rezar por el futuro de los robots

La preocupación por un desarrollo ético de la inteligencia artificial no es tampoco ajena a la Iglesia. El papa Francisco pidió en noviembre de 2020 a los fieles católicos que recen por el futuro de la Inteligencia Artificial y los robots, para que no se vuelvan contra la humanidad.  Se trata de una serie de problemas y cuestiones que el máximo dirigente de la Iglesia Católica presenta a los fieles como sugerencias para sus oraciones personales.