El torneo de Wimbledon es el campeonato de tenis más antiguo del mundo. Y aunque no ha perdido su atractivo, los organizadores buscan maneras de seguir llegando a los más jóvenes, más interesados por otras disciplinas como los e-sports, capaces de congregar, como en la última final de League of Legends, a 73 millones de espectadores.
Para ello, han firmado una alianza estratégica con IBM, con el objetivo de incorporar herramientas de Inteligencia Artificial que hagan más atractivo el torneo a las generaciones a las que un duelo entre Nadal y Federer no les resulta ya atractivo. Así, ofrecerán a los aficionados del torneo chatbots, vídeos generados automáticamente y estadísticas en tiempo real.
En esta edición, tanto la app como la página web del Grand Slam se actualizará de forma automática y se personalizará en función de la audiencia. También se ofrecerá a los fans una nueva versión de contenido estadístico en tiempo real, con la que se permitirá a los usuarios tener información detallada de forma personalizada.
El software está impulsado por una Inteligencia Artificial que se ejecuta en la nube de IBM y las tecnologías de la nube híbrida. Incluye nuevas funciones mucho más inteligentes, como el "Win Factors", en el que los aficionados podrán entender el rendimiento de los jugadores sobre las distintas superficies, y que además utiliza una serie de algoritmos para conjugarlo con el nivel del ránking de la ATP/WTA y dar resultados más fiables.
Wimbledon ofrece reels de video de dos minutos de duración de producción automatizada que derivan en “highlights”, donde los algoritmos analizan el momento del partido, la importancia que tuvo el punto en su desarrollo y la reacción de los espectadores en el estadio. Según relata La Nación, se trata de un desarrollo que Wimbledon introdujo por primera vez en 2016 y que ahora retoma sin ningún proceso manual y listo para publicar en cuestión de minutos.
Otra novedad en 2022 es la herramienta de predicción interactiva "Have Your Say", que permite a los aficionados registrar sus propios pronósticos sobre los resultados de los partidos y luego comparar su análisis con las predicciones. Estas funciones se completan con otros contenidos para tratar de captar la atención de los más jóvenes, como unos videos donde se explican los “viejos duelos” de Wimbledon, como la final de 2008 entre Nadal y Federer, considerada uno de los mejores partidos de la historia del tenis.
El torneo inglés, que se disputó por primera vez en 1877 y cuyas pistas fueron bombardeadas por los alemanes durante la Segunda Guerra Mundial, tiene previsto este año alcanzar 28 millones de fans en sus plataformas sociales y llegar a los 244 millones de usuarios a través de las ediciones digitales de quienes les dan cobertura al torneo. A estos números hay que agregarles los 110 millones de telespectadores que Wimbledon espera contabilizar una vez terminado el torneo.