Passivhaus es un estándar para la construcción de viviendas originado a partir de una conversación que tuvo lugar en mayo de 1988 entre los profesores Bo Adamson de la Lund University, Suecia, y Wolfgang Feist, del Institut für Wohnen und Umwelt. Se basa en levantar construcciones que cuenten con gran aislamiento térmico, un riguroso control de infiltraciones, y una máxima calidad del aire interior, además de aprovechar la energía del sol para una mejor climatización, reduciendo el consumo energético en el orden de un 70%.
La certificación Passivhaus es un documento que reconoce con carácter oficial que las casas son merecedoras de ser consideradas sostenibles. Por su parte, el certificado verde creado por el Green Building Council España califica a los inmuebles de 0 a 5 hojas según su impacto ambiental. A mayor número de hojas, mayor copromiso con el medio ambiente.
En la actualidad, solo existen 19 viviendas en todo el mundo certificadas Passivhaus Premium y solo un prototipo con 5 Hojas Verde, lo que la convierte en la vivienda más ecológica del mundo. Y esa casa está en Barcelona.
En concreto, se encuentra en Sant Andreu de la Barca, en el área metropolitana de la ciudad condal, y presume de ahorrar un 90% de la energía respecto a las casas tradicionales.
La casa dispone de 312 m2 distribuidos en dos plantas. Cuenta con cuatro habitaciones y tres baños y destaca por haberse construido con módulos prefabricados, madera y con el estándar passivhaus, lo que permite tener un consumo energético casi nulo.
La demanda energética de esta vivienda en calefacción y refrigeración es de 10kWh/m2. Además, cuenta con un sistema de domótica y un sistema de ventilación mecánica de doble flujo con recuperación de calor, típico del estándar passivhaus.
Su estructura es de abeto clase 24, muy resistente y con una humedad inferior al 15%. Además, puede optimizar la iluminación y el confort a través de una ventilación mecánica de doble flujo con recuperación de calor. El agua caliente sanitaria se controla por aerotermia y usa grifos que ajustan el caudal de agua a la normativa.
Según informa El Idealista, el precio de esta vivienda, desarrollada por el estudio Arquima, puede costar unos 400.000 euros sin contar con el precio del suelo, y la fase de montaje se gestiona para poder ejecutarla en tan sólo dos días.