El 22 de marzo es el Día Mundial del Agua, una efeméride que se remonta a la Conferencia de las Naciones sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (CNUMAD) de 1992, que tuvo lugar en Río de Janeiro entre el 3 y 14 de junio contando con la participación de 179 países.
Esta conferencia mundial resultó en la aprobación del 'Programa 21' o el 'Proyecto XXI' de la ONU, un plan detallado de acciones para promover el desarrollo sostenible que renovaba el 'Programa del Medio Ambiente de las Naciones Unidas' (PNUMA), instaurado en 1972 en la primera Conferencia de Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente Humano (CNUMAH), también conocida como la 'Cumbre de la Tierra de Estocolmo'.
La 'Agenda 21' establece las acciones que deben ser acometidas a nivel mundial, nacional y local para desarrollar una política ambiental global que abarque todas las áreas relacionadas con el desarrollo sostenible del planeta. Obviamente, el agua es una de ellas y el 'Programa 21' la aborda en su capítulo 18, titulado "Protección de la calidad y el suministro de los recursos de agua dulce: aplicación de criterios integrados para el aprovechamiento, ordenación y uso de los recursos de agua dulce". Entre todas las medidas que propone este capítulo, se encuentra una recomendación dirigida a las Naciones Unidas para que proclamara un día mundial dedicado al agua. La Asamblea General de las Naciones aceptó esta sugerencia y no tardó en formalizarla, con la aprobación de la resolución A/RES/47/193 del 22 de diciembre de 1992, por la cual se declaró el 22 de marzo el Día Mundial del Agua.
Esta conmemoración se celebró por primera vez en 1993, por lo que este año cumple exactamente tres décadas. A lo largo de todo este tiempo, su objetivo siempre ha sido el mismo, generar conciencia acerca de la importancia de conservar y desarrollar los recursos hídricos difundiendo información sobre los problemas relacionados con el agua –como su escasez, suministro inadecuado, falta de saneamiento y contaminación o su impacto en el cambio climático– y las medidas que se deben tomar para contrarrestarlos.
Y es que, como destacan fuentes de Aqualia, compañía española que se sitúa como la cuarta empresa de Europa y la novena del mundo por población servida, "es muy necesario recordar que el agua es un recurso vital que hay que preservar y proteger en un papel que debemos asumir todos: ciudadanos, organizaciones, empresas y administraciones".
El Día Mundial del Agua se celebra cada año con lema o un tema central con el que se pone el foco en algún aspecto particular vinculado al agua. El del primer día mundial del agua, de 1993, fue "Cuidar de nuestros recursos hídricos es cosa de todos" y el lema elegido para este año es, basándose en el aforismo de Gandhi, "Sé el cambio que quieres ver en el mundo". Y es que, como indica la web oficial de esta fecha, el Día Mundial del Agua 2023 trata de eso, de "acelerar el cambio para resolver la crisis del agua y el saneamiento".
"Y como el agua nos afecta a todos, necesitamos que todos tomen medidas. ¡Eso significa tú! Usted y su familia, la escuela y la comunidad pueden marcar la diferencia al cambiar la forma en que usa, consume y administra el agua en sus vidas".
Conferencia del Agua de la ONU 2023
El Día Mundial del Agua 2023 no solo va a tener una relevancia especial por cumplir 30 años de historia, sino también porque durante esa misma jornada, 22 de marzo, va a arrancar la Conferencia del Agua de la ONU 2023, que va a tener lugar en Nueva York hasta el 24 de marzo y que es la primera de su tipo desde 1977, ahí es nada. Convocada por la Asamblea General de la ONU y copatrocinada por los Países Bajos y la República de Tayikistán, esta conferencia tiene como telón de fondo el "Decenio de Acción del Agua", adoptado por unanimidad en diciembre de 2016 por la Asamblea General de las Naciones Unidas, a través de la resolución "Decenio Internacional (2018-2028) para la Acción – Agua para el Desarrollo Sostenible".
Esta iniciativa forma parte de la "Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible", establecida por Naciones Unidas en 2015 e integrada por 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) entre los que se incluye el de lograr un acceso universal al agua potable y garantizar el saneamiento y su gestión sostenible para 2030, el ODS 6.
La Conferencia del Agua de la ONU 2023 pretende servir para hacer balance de la mitad del periodo transcurrido en esta década de acción del agua, como da a entender el nombre con el que se la conoce formalmente, "Conferencia de las Naciones Unidas sobre la Revisión Integral de Medio Término de la Implementación de los Objetivos del Decenio Internacional para la Acción, 'Agua para el Desarrollo Sostenible' 2018-2028".
Desde Aqualia, filial de agua de FCC, ya han hecho este balance para Escudo Digital y tiene luces y sombras. Por un lado, la empresa valora positivamente el hecho de que "tanto la Unión Europea como el Gobierno de España han identificado la transición verde y la digitalización como los ejes clave del progreso de nuestras economías, dirigiendo la inversión hacia un modelo productivo que abogue por la descarbonización". Sin embargo, apunta que "es necesario dirigir también ese esfuerzo inversor hacia el sector del agua, apostando por nuevos sistemas, por la renovación del parque de infraestructuras públicas, la mejora de depuración de aguas residuales, adaptándonos a las nuevas exigencias de calidad y digitalización", lo que "también mejora la calidad de vida del ciudadano".
Además, la compañía española, destaca que, al igual que otros operadores del ciclo del agua tanto públicos como privados, lleva años "mejorando la tecnología y aplicando la I+D orientada a la economía circular", pero que ahora el sector demanda "más agilidad en la legislación, porque partimos de una base en la que esos procesos no existían".
"Necesitamos estar alineados y que se impulse la innovación y la tecnología para poder ser más eficientes y avanzar en ámbitos como la reutilización del agua".
La Conferencia del Agua de la ONU 2023 cuenta con una agenda muy cargada de actividades, en la que habrá entre tres y cinco eventos especiales, más de una veintena de eventos paralelos, así como seis reuniones plenarias y cinco diálogos interactivos de múltiples partes interesadas. Los temas de los diálogos interactivos se han sometido a un proceso de consulta entre las entidades de las Naciones Unidas, los Estados miembros y todas las partes interesadas, que han acordado que sean los siguientes:
- Agua para la salud: Acceso seguro a agua potable, higiene y saneamiento (ODS 6.1, 6.2, 6.3 y ODS 1, 3, 4, 5, 17).
- Agua para el desarrollo: valoración del agua, nexo agua-energía-alimentos y desarrollo económico y urbano sostenible (ODS 6.3, 6.4, 6.5 y ODS 2, 8, 9, 11, 12).
- Agua para el Clima, la Resiliencia y el Medio Ambiente: fuentes al mar, biodiversidad, clima, resiliencia y reducción del riesgo de desastres (ODS 6.5, 6.6, 7, 11.5, 13, 14, 15).
- Agua para la cooperación: cooperación transfronteriza e internacional en materia de agua, cooperación intersectorial y agua en la Agenda 2030 (ODS 6.5, 6.b y ODS 16, 17).
- Decenio de Acción del Agua: Acelerar la implementación de los objetivos del Decenio, incluso a través del Plan de Acción del Secretario General de las Naciones Unidas.
La Agenda de Acción del Agua
La Conferencia no pretende negociar nuevos compromisos, sino asegurarse de que los países cumplen los que ya han asumido. Por ello, está dirigida a orientar a la acción, desde un enfoque inclusivo e intersectorial, y teniendo como uno de sus grandes objetivos la puesta en marcha de una 'Agenda de Acción del Agua', que va a involucrar a todos los sectores de la sociedad, recopilando todos los compromisos relacionados con el agua que adquieran voluntariamente porque cada acción, por pequeña que sea, contribuye a resolver la crisis del agua y a estar más cerca de alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible de la Agenda 2030. Además, la 'Agenda de Acción del Agua' está concebida para que también sea una plataforma que va a permitir hacer un seguimiento de los avances que se van cosechando.
"Necesitamos compromisos, promesas y acciones claras, en todos nuestros sectores, industrias e intereses, uniendo naciones, partes interesadas y profesionales en acciones que ayuden a cumplir con las acciones de agua en la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, acciones que se pueden escalar y replicar en los próximos años. Dichos compromisos se compilarán en la 'Agenda de Acción del Agua', otro resultado clave de la Conferencia", resalta la ONU, y añade:
"El énfasis debe estar en la implementación acelerada y el impacto mejorado para lograr el ODS 6 y otros objetivos y metas relacionados con el agua, considerando el contenido, el proceso y la estructura. Los desafíos actuales y futuros en el campo del agua requieren ideas innovadoras y transformadoras y un enfoque más allá del 'sigamos como hasta ahora".
Aqualia también considera que la innovación es una de las claves en la hoja de ruta hacia un futuro sostenible, al igual que la investigación y la inversión, ya que sostiene que la única solución para hacer frente a la escasez de agua es gestionarla de forma eficiente a través de la mejora y el desarrollo de tecnologías hídricas. Precisamente en esto es en lo que hace hincapié en el Día Mundial del Agua de este año, en el que advierte que la escasez de agua es "un desafío que irá en aumento con el paso del tiempo".
Paralelamente, la empresa respalda la 'Agenda de Acción del Agua' y señala que el primer logro a conseguir es "unir a los distintos actores alrededor de una problemática común y dejar patente que todas las partes interesadas tienen un rol".
"En el caso del sector privado ese deber es invertir, implementar los cambios y comprometerse a la acción. Pero también los gobiernos deben fomentar el entorno político necesario, incentivando las acciones. Los ciudadanos, por su parte, tienen que tomar una posición que apoye, promueva y participe en la gestión sostenible del recurso. Debemos aprender que todo pasa por el agua y el agua pasa por todos. Es necesario despertar la conciencia de que todos tenemos un rol en la gestión sostenible del agua".
Esta es precisamente la filosofía que Aqualia viene desarrollando como miembro de la alianza StepbyWater, un punto de encuentro entre el sector privado, las instituciones públicas, el tercer sector y la sociedad civil para impulsar la sostenibilidad en la gestión del agua y sentar las bases del desarrollo sostenible. Esta alianza ha sido registrada, publicada y validada por Naciones Unidas como 'Commitment'.
A día de hoy, estamos muy lejos de conseguir el ODS 6
Para la ONU, la Conferencia del Agua llega en "un momento crucial" para acelerar la acción del agua con el fin de lograr el ODS 6 sobre el agua y saneamiento, así como otros marcos como el Acuerdo de París o su Agenda Común. En cuanto al ODS 6, la ONU también advierte que nuestro progreso hacia él "sigue estando alarmantemente desencaminado, lo que pone en peligro toda la agenda de desarrollo sostenible". Y es que, según remarca, el agua, como elemento esencial en todos los aspectos de la vida, está intrínsecamente ligada a los pilares del desarrollo sostenible.
"Es transversal e influye en la consecución de muchos ODS a través de los estrechos vínculos que mantiene con el clima, la energía, las ciudades, el medio ambiente, la seguridad alimentaria, la pobreza, la igualdad de género y la salud, entre otros".
Aqualia comparte esta visión y califica el ODS 6 como "una especie de 'Mega-ODS', o palanca para todo el resto de los objetivos, ya que avanzar en este objetivo supone un impulso en todos los demás".
Desgraciadamente, estamos muy lejos de alcanzar el ODS 6 y, además, la ONU también alerta que el cambio climático está acelerando tanto la escasez de agua como los peligros relacionados con este recurso (como inundaciones y sequías), "ya que el aumento de las temperaturas altera los patrones de precipitación y todo el ciclo del agua".
Según el último Informe anual sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible, elaborado por el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de la ONU (DESA) y publicado el año pasado, actualmente hay alrededor de 2.000 millones de personas en todo el mundo que carecen de acceso a agua potable y cada año fallecen unas 829.000 personas a causa de enfermedades directamente atribuibles al agua insalubre, saneamiento inadecuado y malas prácticas de higiene. De acuerdo a este informe, alcanzar los objetivos de agua potable, saneamiento e higiene para 2030 requerirá cuadriplicar el ritmo de progreso actual.
Una "oportunidad única" para buscar soluciones a la crisis del agua y acelerar el cambio
Según afirma la ONU, la conferencia va a ser "una oportunidad única para buscar soluciones a la crisis actual del agua y el saneamiento", una percepción compartida por la Unión Europa, que ya se ha comprometido a "desempeñar un papel activo" para situar el agua en un lugar más destacado de la agenda mundial y acelerar la acción para alcanzar el objetivo de agua limpia y saneamiento para todos en 2030.
"Los gobiernos y las partes interesadas en el tema de todos los estratos de la sociedad se unirán en este evento para asumir voluntariamente compromisos que aceleren el progreso en el ODS 6 (Agua limpia y saneamiento) y otras metas relacionadas con el agua que han sido acordadas internacionalmente. Serán precisamente estos compromisos los que formen la llamada 'Agenda de Acción del Agua', un plan rápido y transformador en el que también puede estar reflejada tu acción individual", apunta la ONU.
La Conferencia del Agua de la ONU 2023 se va a complementar con la Semana del Agua de Nueva York, que dio el pistoletazo de salida este pasado sábado, 18 de marzo, y se prolongará hasta este viernes, día 24. La Semana del Agua de Nueva York está organizada por el Gobierno de los Países Bajos y la ciudad de Nueva York. También es independiente de las Naciones Unidas, al igual que la Semana Mundial del Agua, que se celebra todos los años desde 1991 en el Stockholm City Conference Centre de la capital sueca y que este año va a tener lugar entre los días 20 y 24 de agosto. Esta Semana Mundial del Agua fue proclamada por el Stockholm International Water Institute (SIWI) y la edición de 2023 va a estar centrada en la innovación como "semilla del cambio" para conseguir "un mundo sabio del agua" y para afrontar los "desafíos sin precedentes" que tenemos ahora mismo por delante en materia del agua.
¿Cómo se pueden resolver los retos hídricos? ¿Y la crisis del agua?
Las fuentes de Aqualia consultadas por Escudo Digital también se han atrevido a responder a estas cuestiones. En cuanto a los retos hídricos, han subrayado que "exigen responsabilidad y acciones por parte de todos", siendo necesario establecer asociaciones "basadas en principios y valores, que se centren en las personas y en el planeta".
Por otro lado, para resolver los problemas que atañen al agua, apuntan que es necesaria "una planificación sostenida, no actuaciones aisladas". "Sin planificación no podemos enfrentar los desafíos que vienen. Un uso más eficiente en el uso de los recursos y un sector del agua más competitivo ayudarían a construir las ciudades resilientes que los ciudadanos demandan". En esta labor, han destacado igualmente el papel que juegan las compañías, que "deben establecer los ejes de actuación para maximizar su labor al desarrollo sostenible".
Finalmente, las fuentes de Aqualia han puesto el foco en España para avisar que es imprescindible hacer "un esfuerzo inversor en nuevos sistemas públicos, en renovar y actualizar el parque de infraestructuras públicas existentes, y en adaptarnos a las nuevas exigencias de calidad y digitalización que nos está marcando la Unión Europea".