El 51% de los viajeros estarían dispuestos a cambiar su destino original si esto redujese el impacto medioambiental. Y, según un estudio elaborado por Booking antes de la pandemia, el 60% de los mismos estarían encantados de tener un servicio que les recomendase destinos en el que el turismo impactará de forma positiva.
Otro estudio, este de Hosteltur, revela cómo la sostenibilidad gana cada día más peso entre los españoles como criterio de elección del destino a visitar, pasando a ser el tercer atributo más buscado tras la seguridad sanitaria y el componente cultural del espacio. Y es que el turismo dista mucho de ser una actividad aislada, y se sustenta sobre un sistema de interconexiones que comprende a los propios turistas, la comunidad local y el entorno físico donde se desarrolla.
Bajo esta premisa surge el llamado turismo regenerativo, una concepción que va más allá de la conservación o la mitigación de impactos negativos y que apuesta por revertirlos e intervenir de manera positiva para mejorar las condiciones existentes. Es una forma de viajar más allá de la sostenibilidad, de impactar de forma positiva mejorando el destino visitado.
De esta manera, podríamos establecer una diferenciación entre el turismo sostenible y el regenerativo: mientras el primero de ellos tiene por objeto ralentizar el proceso de degradación del entorno, el segundo busca recuperarlo y mejorarlo.
De todo esto se hablará y mucho a partir del próximo domingo en Fitur, la Feria internacional del Turismo que se celebrará en Madrid del 18 al 22 de enero y que aspira a superar los 111.193 visitantes que congregó en su pasada edición. Un reto para nada inalcanzable si tenemos en cuenta el peso que el turismo está teniendo en la recuperación económica post-covid.
Para impulsar este tipo de turismo, el certamen ha puesto en marcha Fitur Next, una sección especializada que dedicará este año su reto a explicar cómo el turismo puede contribuir a la regeneración de los espacios naturales. En su informe FiturNext 2023, reconoce tres proyectos por su excelencia en el turismo regenerativo.
El Plogging es la práctica que combina el ejercicio al aire libre con la recogida de residuos para la conservación del patrimonio natural y cultural. Nació como una actividad organizada en Suecia y se ha replicado en otros países desde el año 2018. También ayuda a sensibilizar y concienciar de la responsabilidad individual y colectiva que tenemos con el planeta, con la comunidad y con las futuras generaciones.
A través de esta iniciativa, que ha replicado la original en varias ciudades españoles, se pone la experiencia de deporte y actividad física en el centro, pasan de la competición al objetivo territorial para recuperar el máximo de basura. Unen arte, reciclaje y economía circular. Existen tres tipos de niveles de participación (por ejemplo, familias y personas con necesidades especiales hacen 1 km de recorrido, el resto carrera popular de 5kms y una pro de 11 kms).
Al finalizar hay también juegos con artistas para recuperar y reutilizar la basura recuperada. Se combina running, senderismo, kayak, bici… Al terminar la competición se hace triaje de materiales con el equipo para reutilización de los mismos. Se realiza a través de la participación ciudadana, residentes, visitantes, y empresas.
En total, según desvela el informe, se han recogido 330.800 kgs en 33 recorridos en actividades realizadas en 11 ciudades españolas.
2. La hoja de ruta para la salud costera de Iberostar
El grupo Iberostar ha puesto en marcha una iniciativa en la que trabajan tanto el personal del hotel como los huéspedes del mismo. Está enfocada en la regeneración del coral, pero también trabajan en proyectos relacionados con las dunas, el manglar y el pasto marino para que interactúen entre las cuatro de manera que puedan subsistir interrelaciones entre estos elementos.
Desde 2017, año en que se puso en marcha la campaña, los empleados han recibido 5.000 horas de formación en temas regenerativos. Trabajan en 7 arrecifes para su regeneración. Para los corales disponen de 5 sitios con viveros de coral, uno en preparación y 3 en análisis. Para manglares tienen un vivero con más de 15.000 plantas en República Dominicana. Para México y Brasil, más de 20.000 plantas de dunas sembradas.
Con estas acciones se ha logrado un aumento generalizado de la biomasa de pesca, lo cual repercute en las economías locales. Tras tres huracanes se ha notado el resultado al haber ocasionado menos destrozos.
Es una agencia de viajes que ofrece experiencias de turismo comunitario en Latinoamérica. Contactan y codiseñan con agentes locales el recorrido que van a ofrecer a los viajeros. Por ejemplo, en el proyecto de Chiapas, los viajeros van a la selva a vivir con ellos, plantan especies autóctonas y realizan actividades para la implicación en el destino y con la comunidad local.
Trabajan con hoteles que dan trabajo a comunidades indígenas y solo viajan con grupos reducidos para minimizar el impacto producido en el territorio. También realizan actividades de formación a través de colaboraciones con otras organizaciones enfocadas en turismo regenerativo.
En el proyecto de reforestación de Chiapas se han plantado hasta la fecha 1.800 árboles y han formado a alrededor de 500 personas a través de las diferentes acciones de divulgación.