Estos símbolos, que usamos a diario para expresar una idea o emoción junto a nuestros mensajes de texto, son ya parte habitual de nuestra comunicación diaria. Emoji, emoticonos, caritas… Su creador, el diseñador japonés Shigetaka Kurita, los diseñó en 1998 cuando trabajaba para una de las operadoras de telefonía móvil más importantes del país, NTT DoCoMo.
Lo que empezó siendo una forma de expresar un estado deánimo se ha convertido en casi una plaga de nuestra época. Pero el fenómeno tienesus antecedentes y las comunicaciones digitales han ido enriqueciendo sus recursospara mostrar distintas reacciones. Poco a poco, los emoticonos se han vuelto unfenómeno indispensable, hasta el punto de estar jugando un papel importante enla forma de expresarnos y en el lenguaje con el que nos comunicamos.
“Emoji” ya fue elegida por la Fundéu BBVA como la palabra del año 2019
La compañía masvoz, con 17 años de experiencia en el sector de las comunicaciones, ha decidido celebrar el Día Mundial del Emoji, que se conmemora cada 17 de julio desde 2014, con un repaso de los principales cambios que han revolucionado la forma en que nos comunicamos en los últimos años. Aquí les ofrecemos sus historias, reflexiones y ejemplos:
● Los mensajes de texto superan a la voz. La irrupción de las aplicaciones de mensajería instantánea como WhatsApp, Facebook Messenger o Telegram han sido un factor clave para que los mensajes de texto se popularicen, sustituyendo a los SMS y destronando a las llamadas de voz. De hecho, un 95% de la sociedad española utiliza alguna de estas aplicaciones como principal canal de comunicación
● Los primeros emoticonos. A menudo se confunden los términos ‘emoticono’ y ‘emoji’ para referirse al mismo concepto. Podría decirse que los emoticonos son sus predecesores, ya que son aquellos símbolos que utilizan signos de puntuación para reflejar expresiones faciales, como :-) o :-D, que se traducen en caritas amarillas o ‘smileys’. Fue en 1963 cuando Harvey Ball creó la popular cara sonriente amarilla como logo para una compañía de seguros.
● La irrupción de los emojis. Desde su creación en 1998, estos símbolos, propiamente llamados pictogramas, han ido evolucionando y, al contrario que los emoticonos, expresan otros conceptos además de emociones, como fenómenos climatológicos, animales o deportes. La organización que regula y estandariza los emoticonos, el Consorcio Unicode, añadió finalmente los emojis a su lista en el año 2010 y desde entonces, se hicieron accesibles para todos los usuarios. De acuerdo con la plataforma Facebook Messenger, sus usuarios envían 5.000 millones de emojis a diario y el fenómeno es tal que la propia palabra Emoji ha sido elegida por la Fundéu BBVA como palabra del año 2019.
● La voz, protagonista de nuevo. Por otra parte, pocoa poco, la voz también ha ido recuperando su terreno, ya que es una forma másrápida y, al fin y al cabo, más humana y cercana de comunicación. Prueba deello es la popularización del envío de notas de voz mediante las aplicacionesde mensajería. WhatsApp añadió esta funcionalidad en 2013 y desde entonces lasdiversas plataformas la han imitado. Sin ir más lejos, Twitter incorporó el mespasado los mensajes de audio de 280 segundos en la red social, de momento solodisponible para dispositivos con iOS.
Finalmente, durante el confinamiento producido por la alertasanitaria debida al Covid-19, se ha comprobado cómo la voz cobraba protagonismoen las comunicaciones tanto personales como empresariales. Concretamente enEspaña, los usuarios de aplicaciones de videoconferencias se duplicaron en esteperíodo.
“La forma en la que nos comunicamos ha experimentadograndes cambios en los años más recientes e incluso meses. En nuestraplataforma Enreach Meetings se crearon 10.000 salas de reuniones en lasprimeras cuatro semanas de confinamiento. La comunicación seguirá evolucionandogracias a la tecnología y la Inteligencia Artifical con la popularización de latranscripción de voz a texto o los chatbots de voz”, afirma María JoséJerez, Chief Marketing Officer de masvoz.