La Conselleria de Sanidad de la Comunidad Valenciana va a reforzar la protección de los vigilantes de seguridad desplegados en los hospitales y centros de salud de su territorio. En el próximo proceso de licitación de los servicios de vigilancia y seguridad de estas instalaciones, las empresas adjudicatarias estarán obligadas a dotar a sus vigilantes con chalecos antitrauma y antipinchazos.
Así lo ha anunciado Alternativa Sindical, sindicato que ha impulsado la inclusión de estos chalecos en el pliego de las prescripciones técnicas del próximo concurso al presentar una denuncia ante la Inspección de Trabajo de Valencia.
En un comunicado, Alternativa Sindical indica que esta denuncia, interpuesta "hace unos meses", acusaba a las empresas de seguridad que mantienen el contrato de vigilancia y seguridad de los hospitales y centros de salud de la Comunidad Valenciana de incumplir la Ley 31/1995, de 8 de noviembre, de prevención de riesgos laborales, lo que "ha generado agresiones hacia los vigilantes de seguridad a la hora de tener que intervenir para proteger al personal sanitario".
"La Inspección de Trabajo pudo constatar que, como informó Alternativa Sindical, las empresas de seguridad no cumplen con la evaluación específica de riesgos laborales ni de los riesgos psicosociales que afectan, de manera directa, a los vigilantes de seguridad en el desempeño de sus funciones en los recintos hospitalarios", señala el sindicato.
Una vez que la Inspección de Trabajo finalizó las pertinentes actuaciones, se las remitió a la Dirección General de Gestión Económica, Contratación e Infraestructuras de la Conselleria de Sanidad de la Comunidad Valenciana con la recomendación de que incluyera la obligatoriedad de los chalecos antitrauma y antipinchazos en sus próximos contratos de vigilancia y seguridad.
La Conselleria ha aceptado esta recomendación, tal como ha confirmado a Alternativa Sindical, que considera esta medida como "una magnífica noticia para los vigilantes de seguridad de los Hospitales y Centros de Salud de la Comunidad Valenciana". Y es que, según apunta, "la implementación de este tipo de dotación, sin ninguna duda, minimizará los daños que reciben los vigilantes de seguridad frente a las agresiones y, por ende, permitirá que estos puedan proteger de forma más eficaz al propio personal sanitario".