A finales del pasado mes trascendió una importante noticia dentro del sector de alarmas, tal y como desde Escudo Digital nos hicimos eco, según la cual ADT ultimaba la compra de las alarmas del grupo INV. Un mes más tarde estamos en condiciones de informar en primicia que finalmente las negociaciones entre la filial española del gigante norteamericano y su rival español INV han quedado suspendidas y finalmente ADT deberá realizar otras operaciones para seguir creciendo en el mercado nacional y acercarse a las cifras de Movistar Prosegur Alarmas y de Securitas Direct.
El acuerdo parecía prácticamente cerrado, pero según hemos podido saber en exclusiva, a través de fuentes cercanas a la operación, ambas compañías han paralizado sus negociaciones por divergencias en el precio. El montante que cada una de ellas barajaba para la operación se desconoce, si bien Expansión señalaba inicialmente que, "en la actualidad, el valor de las compañías del sector de alarmas de seguridad se sitúa alrededor de 2.500 euros por cliente, aunque es una cifra que depende del ingreso medio que se obtenga por usuario. Pero con esa valoración, la operación de compra por parte de ADT podría situarse en una horquilla alrededor de los 90 o 100 millones de euros". Frente a esta estimación, fuentes del sector nos han asegurado que esos precios están muy por encima de lo que se baraja en este mercado, ya que sostienen que el precio medio del cliente ronda entre los 1.200 y los 1.500 euros, como máximo.
A falta de acuerdo, INV continuará formando parte del grupo INV y se mantendrá como la cuarta compañía de alarmas con más clientes en nuestro país, con entre 60.000 y 70.000. Por delante de ella se sitúa ADT, con entre 115.000 y 120.000, y Movistar Prosegur Alarmas y Securitas Direct, con unos 300.000 y 1.250.000 clientes respectivamente.